jueves, 10 de noviembre de 2011

Superficie



Sería importante no querer replicar cuadros del pasado, no caer en las mismas equivocaciones de liceo y tratar de construir con autenticidad un futuro creativo, algo sin duda novedoso, que no me haga retroceder a los recuerdos de los cuales debería haber aprendido y orientado estrategias para evadir las partes negativas.
Sin embargo es difícil avanzar con confianza por un camino tan poco delineado, se hace complicado aplicar las tácticas de reconocido éxito en cierta circunstancia, en otra que puede ser similar, pero que sin embargo nunca será completamente igual.

Pero inevitablemente me veo inmersa en el círculo vicioso de la filosofía del eterno retorno y cuesta mucho zafarse de esas lianas que prometen sujetar con firmeza un cuerpo cada vez más abandonado.
¿El abandono del cuerpo puede entenderse como libertad? Siddharta, "aquel que logró sus objetivos", por lo que entiendo me diría que no tajantemente y justificaría que el abandono del cuerpo concebido como la entrega hacia las debilidades humanas, como el sexo y la vanidad, no conlleva a mayor libertad sino al contrario guiaría a una esclavitud del cuerpo, a una potente dependencia, a la disipación y el olvido por una expresión exagerada de superficialidades.

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